Po un lado están las candidaturas testimoniales, o virtuales, o eventuales, como recientemente las llamaron los políticos más representativos de esta nueva metodología de manipulación del electorado. Me refiero a Scioli y a Massa, que encabezarán las listas del oficialismo, pero que “eventualmente” asumirán sus bancas en el Congreso, como lo indicaron ante el tribunal que analiza esta cuestión en base a un pedido de impugnación de la oposición.
Políticos que renuncian a su cargo para competir por otro, como el caso de Gabriela Michetti, que deja su cargo como vicejefa de gobierno para pelear por una banca en la cámara baja. Una falta de respeto a aquellos que la votaron, a los que se los trata de convencer aduciendo que es un cambio para mejor y porque no hay otras alternativas ante la falta de caras nuevas en el partido.
Alianzas circunstanciales que sólo buscan obtener poder y luego se disolverán irremediablemente. Me refiero a la Unión PRO, donde Solá esta cada día más solo, y hasta se lo aparta de los spots publicitarios de campaña. ¿Alguien cree realmente que esta unión prosperará más allá del 29 de junio? Directamente imposible. La otra alianza, el Acuerdo Cívico y Social parece un poco más aglutinado, pero el personalismo de su líder siempre termina generando disputas internas. Carrió está tratando de evadir el puesto de número uno de este sector, pero es claramente la cara visible de este conglomerado de partidos que prometen ser la segunda fuerza a nivel nacional, pero que ante una derrota corre serios riesgos de desarticularse.
Las caminatas de las falsas promesas. Todos los candidatos realizan innumerables giras por sus distritos electorales en épocas de campaña, luego no vuelven al llano si no es para anunciar obras. Cada día esto resulta más ridículo, y es asombroso como se menosprecia el nivel intelectual de los votantes a los que se intenta convencer con una recorrida vacía de contenido, y a los que luego jamás le vuelven a ver las caras.
Un vicepresidente que no habla con su presidenta, y además arma listas opositoras desde su cargo. En vez de renunciar ante la falta de diálogo y el menosprecio que recibe desde el resto del Poder Ejecutivo, se encarga de generar más conflictos caprichosos y sin sentido, participando del armado opositor. Debemos ser el único país del mundo en donde pasa esto. Extraño privilegio.
Una sociedad apática que no se presenta para fiscalizar los comicios. Otra señal de quiebre y ruptura entre las personas y el cuadro político, deslegitimado desde la década menemista. Casi me olvido, tenemos un ex presidente que con varias causas a cuesta por delitos cometidos durante su gestión ya se postuló para el 2011. Es algo que me genera tristeza, ver un hombre tan defenestrado por la ambición de poder.
Si juzgamos nuestra democracia con la escala de valores que rige a los países desde donde importamos la democracia, seguro la respuesta es negativa con respecto a la forma en que la estamos llevando adelante.
¿Hay que modificarla, adaptarla, o aceptarla? Un poco de las tres creo yo, sin caer en la resignación, pelear cada uno desde su lado para mejorar este sistema, o buscar un modelo superador que se adapte mejor en estas latitudes, en esta coyuntura, en esta idiosincrasia.
1 comentario:
MENOS MAL Q TERMINO TU ARTICULO!!!!!!
Es para llorar despues de leer la enumeracion de aberraciones politicas....
Me gusto lo de democracia argentinizada....porq esto es un invento argentino...DEMOCRACIA NO ES!!!!!!y nosotros los argentinos q las sabemos todas creamos este engendro politico q da nauseas....
Que se puede agrgar a lo q tan claramente y real escribiste....DA VERGUENZA!!!!!pero es lo q tenemos....y somos responsables
LO MERECEREMOS?????
Creo q si y lamentablemente no veo mucha esperanza de cambio....
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